Las placas de pladur son admiradas por su fácil, rápido montaje y limpieza, ya que es en seco. También por su acabado uniforme que cumple con los controles de calidad ahorrando tiempo y dinero el cual no se consigue con los materiales de pintura o ladrillos. Por otro lado, la diversidad de placas y tipos de cortes según su espesor lo hacen un material ideal para crear espacios agradables, creativos y útiles.
Es perfecto para aquellos que estás pensando en hacer reformas, pero no quieren hacer una obra grande, costosa o que dure demasiado tiempo.
Este material asegura un buen aislamiento térmico y acústico gracias a la asociación de aislantes como la lana de roca, creando una cámara de aire entre ambas capas consiguiendo un ahorro de energía considerable y mejorando el confort del habitáculo.
Es muy práctico para dejar oculta la instalación eléctrica ya que el cableado queda escondido y puedes colocar focos empotrados de una forma discreta y elegante. Lo mismo ocurre con el aire acondicionado o la calefacción consiguiendo ocultar las canalizaciones.
Que la colocación de Pladur sea una opción cada vez más extendida no es algo extraño, ya que las ventajas del producto sobrepasan ampliamente a sus inconvenientes.
Si quieres diferenciar entre dos ambientes, con el falso techo puedes lograr una diferencia de alturas que por sí misma delimitará cada ambiente.
Si tienes espacio, pero te falta un armario, coloca un falso techo, rebaja la altura y tendrás un armario de forma económica y práctica. También puedes ocultar la campana de la cocina con un falso techo.
Si tienes techos altos, puedes bajar la altura de la habitación incluso decorar el techo con lamas de madera, bambú o con escayola o yeso laminado.
El principal motivo por el que aconseja un techo de pladur frente a uno de escayola, aparte de por su resistencia, es cuando se quiere añadir algún material aislante complementario ya que se adapta mejor y amplía sus ventajas.
INCONVENIENTES DEL PLADUR
Se aconseja mano de obra especializada, sobre todo para el encintado, ya que si no se hace de manera correcta pueden aparecer burbujas de aire que deterioraran el acabado. No aceptan cualquier tipo de taladro.
No son aptos para la instalación en todos los lugares. Aunque durante los últimos años los avances de este tipo de productos han permitido que se incorporen sin problemas en las cocinas y baños de nuestras casas, siguen estando vetados en los exteriores o en zonas donde la humedad es excesiva o con agua son muy frecuentes, por ejemplo, una sauna.
Son resistentes a la humedad, pero no pueden estar sumergidos en agua.
Aunque parezca madera maciza, no lo es. No se pisa igual, no suena igual. Esto necesariamente no es un problema, aunque para aquellos que buscan sentir la madera directamente sí que puede llegar a serlo.
Si ha llegado el momento de hacer una reforma, confía en nuestra experiencia y conocimiento en la materia y pide un presupuesto. Déjate aconsejar por la empresa Aisladur, la empresa experta en trabajos con pladur. Nuestra empresa realiza todo tipo de obras y reformas a nivel nacional, principalmente en las zona de Tarragona, Reus y Barcelona.